De verdad que empiezo a estar hasta el moño de la palabrita "enfermedad mental". No sé si son los tiempos de no pensar, de no currar, o de no hacer ninguna de las dos cosas. Quiero decir, que si hay diferentes corrientes en cada disciplina científica, y un buen científico se caracteriza por estar al tanto de lo que pasa en su especialidad, que para eso la ciencia evoluciona, se renueva y se replantea constantemente...
¿Por qué carajo en estos temas todos siguen en niveles de asunción acrítica de discursos biologicistas? ¿Es que no les da para más la cabeza? ¿Es que las farmacéuticas se han hecho con el monopolio de las mentes pensantes, para que dejen de serlo? ¿Es que lo que pasa en otros países, otras experiencias, otras épocas, otros enfoques, se ha enviado directamente al camión de los deshechos heréticos?
Si yo no soy nadie, sin título ni carrera de psicología ni de psiquiatría ni hostias en vinagre...¿por qué me enfrento tan a menudo a respuestas resbaladizas sobre temas que llenan los hospitales psiquiátricos de este país? Una vez leí que la filosofía no estaba tanto en tener respuestas, como en hacer buenas preguntas. Si preguntas con cara de inocente, como quien no quiere la cosa (yo juego con la baza de que no se me nota el diagnóstico, aunque más bien lo que no se me nota es la medicación, porque no la tomo), te encuentras, o te enfrentas,o te das de morros, bastante a menudo, con los siguientes dogmas:
Dogma número 1: una psicosis es imposible de tratar sin medicación.
Dogma número 2: una psicosis es cosa de psiquiatras, nunca de psicólogos.
Dogma número 3: no hay nada psicológico en la psicosis, sólo químico.
Así como aperitivo, ya os iré contando más. Grrrrr!!
Teorías del empoderamiento, a tomar el aire, y unas vacaciones, que para lo único que los locos deben empoderarse es para ser capaz, ellos solitos, de tomarse la medicación aunque su madre haya bajado a hacer la compra. Toma Autonomía!!
No puedorrr no puedorrr no puedorrr bufff, qué mosqueo, y así día sí día también. Lo más triste es que este discurso lo empapa todo, incluídas las mentes de quienes más deberían rebelarse contra él, por la cuenta que les trae. No hablo de un abandono masivo de medicaciones, que tampoco estoy tan desinformada como para no saber la pupita que puede hacer pasar determinados monos de cosas FUERTES. Ni siquiera hablo de que la medicación sea siempre horrible o inadecuada, hablo de cómo la medicación anula, a quienes la toman y a quienes la recetan para pensar otras teorías, visiones, enfoques, a medio y largo plazo, de cómo alguien puede asumir que su horizonte vital es medicarse de por vida, y tan contentos.
Y ya volviendo al tema que me toca, un brote es un brote, ni más ni menos, ni más ni menos... pasó, molestó, asustó, se comprendió, se pusieron medios para explicarlo (al afectado/a y a sus allegados), se marcó una medicación temporal, por ejemplo, se rebajó de forma progresiva hasta eliminarla, se complementó con terapia para localizar e identificar el conflicto/s desencadenantes, se trabajó la autoestima, la integración, la prevención en base a identificar y controlar circunstancias "de riesgo" (insomnio recurrente, drogas psicotrópicas, determinados niveles de estrés, sobre todo emocional, identificación cognitiva de ideas autorreferenciales, paranoicas...etc), y con el teléfono de un buen terapeuta a mano, y de mano, (de confianza, que sepa nuestra historia, vamos), si lo anterior no fuera suficiente.¿De verdad es tan complicado? ¿De verdad es más caro que años y años de antipsicóticos, "por si acaso"? Los propios psicólogos deberían ser los más interesados en que esto fuese así. Propongo fundir ambas profesiones, psicología y psiquiatría, en plano horizontal de complementariedad, de intercambio de saberes, eso que llaman multidisciplinariedad, pero de la buena. Por su propio bien y el de todos nosotros.
Buenas noches, y felices sueños.
Darwinismo radical. Las razones por las que creo que existe y seguirá existiendo este estado de cosas: http://laotrapsiquiatria.blogspot.com/2012/01/otra-psiquiatria-2.html
ResponderEliminarCuidadito que te van a llamar radical (juas).
A mi lo de la medicación me parece fantástico siempre y cuando sea una opción y la persona cuente con toda la información posible. Esto incluye plantear los pros y los contra, y definir claramente cuando se trata de una opinión y cuando se habla de hechos. Entonces la persona puede optar libremente. No aspiro a nada mas que eso. Lo que haga cada cual ya es SU problema. Pero claro, esto levanta ampollas en determinados sectores. Una vez una persona formada y supuestamente competente me dijo que como iba a ser que no supiera nada (estabamos hablando de la gente a la que atendíamos y que yo partía del supuesto de que el otro siempre sabe mas de si mismo, es el único que cuenta con buena información). Se me descojonó en mi cara (claro, es que también soy lotero..). Con el tiempo me di cuenta que era puro desconocimiento, ignorancia, ahora ya sabe. Sabe que no sabe. Era cuestión de tiempo y de experiencia.
La reacción ante estos argumentos siempre es la misma. Sorpresa, y luego rechazo. Pero no hay cambio sin perturbación. Y por eso es tan importante lo que haces. Parece que perturbas. Y eso es bueno.
Abrazos.
Jesús.
A todo lo que cuentas, añado algo. En la unidad de hospitalización donde trabajo hay siete psiquiatras y una psicóloga, la que escribe. Hace tiempo hubo un monitor de laborterapia y otro de gimnasia cuyas plazas han desaparecido. Y no existe nada parecido a un equipo y sí una especie de desconfianza flotante de todos contra todos ¿Que si es difícil esto de la multidisciplinariedad? Pues sí, mucho. Tan improbable como imprescindible para irnos cargando esos dogmas de los que hablas.
ResponderEliminarEs que las enfermedades mentales no son chorradas. Las chorradas son chorradas. Las enfermedades mentales son enfermedades mentales. Es como si yo digo que los blogs son chorradas. Pues no. Los blogs son blogs. Y no son chorradas, incluso aunque digan que las enfermedades mentales son chorradas. Porque en un blog habrá mejores entradas que otras. No se puede calificar la totalidad del blog como chorrada. ¿No? Incluso aunque de todas las entradas hubiera una y sólo una que valiera la pena, pues el blog ya no sería enteramente una chorrada. ¿O no? Pues con las enfermedades mentales igual. Aunque haya un único paciente que no se vaya de fiesta y esté jodido, pues las enfermedades mentales ya no son chorradas. ¿A que sí?
ResponderEliminarSe le puede llamar chorradas o de otras maneras menos delicadas, pero de todos modos hay muchas. Y no solo en cuestiones de salud mental. ¿Sabes en cuantas universidades del país que produce el DSM, se imparte 'creacionismo' (a veces -no siempre- con la opción de estudiar aparte la extraña teoría llamada 'evolucionismo')?
EliminarYa sé que eres partidaria de tratar los temas por partes, pero mira, yo creo que que las chorradas que comentas, la que he mencionado yo, y otras muchas más, son manifestaciones del mismo fenómeno, una especie de delirio que -entre otras cosas- produce a sus padecientes un placer onanista al ver crecer las cifras de sus cuentas (y a ignorar o justificar como 'colaterales' otras resultados de sus acciones).
Y, naturalmente, también está el extraño fenómeno de preferir considerar 'enfermedad' a formas de sufrimiento que nada tienen que ver con lo físico. Se toman al pie de la letra la metáfora de 'enfermedad mental'. Mira lo que les dijeron a Pérez Alvarez y Gonzales Pardo:
http://www.lne.es/secciones/noticia.jsp?pRef=1839_46_583748__SociedadyCultura-psiquiatras-cargan-contra-libro-invencion-trastornos-mentales
En fin, que en el siglo XXI aún queda mucho por hacer.
Un abrazo,
Pero al paciente que tiene pensamientos que le incapacitan y le obligan a estar detenido durante una hora o más... no le importan las cifras de las cuentas. ¿Y cómo habla un psiquiatra a otro de un paciente que está perdido en un limbo de pensamientos, parado de pronto, a lo mejor en medio de la calle? Pues le dice algo así: -eh, mira, que este paciente padece obsesiones.
ResponderEliminar¿De qué otra forma podría hacer? El DSM IV pone orden en el caos.
Estoy pensando que si digo que los blogs son chorradas, pues me basaré en algo para compararlos, en cosas
ResponderEliminarque no sean chorradas. Para decir que el paciente es obsesivo compulsivo, pues los psiquiatras también
necesitarán como una referencia, una respuesta a la pregunta ¿cómo es no ser obsesivo compulsivo?
Si llegas tarde a clase, necesitas un justificante. No basta
con decir que tienes pensamientos perturbadores. No basta con una sencilla narración de pensamientos, sentimientos,
sensaciones. Todos los seres humanos tienen de eso. ¿De qué otra forma puede hacer un psiquiatra? Pero si traes un justificante, pues ya no pasa nada. El DSM
son los justificantes. De esa forma la gente normal no ha de detenerse cuando ve al paciente en medio de la calle. Los blogs anti DSM son sus mayores defensores, es la gente de los objetivos la que más necesita el DSM.
Muy interesante tema, me gustan estos datos mentales, hay muchas series que tratan de ello como PSI.
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