"Cuando sienta deseos de hablar de la meditación, de lo bien que le está haciendo a usted, o de lo bien que le podría hacer a quien le escucha, siga meditando. Todo el mundo, empezando por usted, se sentirá mucho mejor"
Y que me aspen si soy capaz de recordar el título del libro del que salió esta cita. Sólo recuerdo que era, cómo no, un libro sobre la meditación Zen, uno de estos dirigidos a profanos occidentales. La cita no tiene precio, nunca entendí mejor la paradoja del zen que con esta cita. Ahora bien, como occidental educada en el método científico,recuerdo a mi pesar que no hay regla sin excepción.
jajajajaja, sarcástica cita!
ResponderEliminarSeguro que te trae recuerdos, siempre pasa.
ResponderEliminarUn abrazo!!!!